Siempre estás separado de Dios, porque nunca estás separado de Dios. Esta es la verdad de tu ser. Estamos completos. Así que ahora sabes toda la verdad. Esta verdad ha sido alimento para el alma hambrienta. Tómalo y cómelo. El mundo tiene sed de esta alegría. Toma y bebe de él. Haz esto en mi memoria. Porque la verdad es el cuerpo y la alegría es la sangre de Dios, que es amor.
Verdad. Alegría. Amar.
Estos tres son intercambiables. Uno lleva al otro y no importa en qué orden aparezcan. Todo conduce a Mí. Todos soy Yo. Y así termino este diálogo como comenzó. Como ocurre con la vida misma, se cierra el círculo. Aquí se te ha dado la verdad. Se te ha dado alegría. Se te ha dado amor. Aquí se le han dado las respuestas a los mayores misterios de la vida.
Ahora sólo queda una pregunta. Es la pregunta con la que empezamos.
La pregunta no es ¿con quién hablo sino quién escucha?
Autor: Neale Donald Walsch
Tapa blanda, 367 páginas, Libro usado en perfecto estado.
